Un muerto en el bosque, un regalo incómodo y un misterioso Quattroni abren este nuevo episodio del Comisario Manara.

Enzo no tiene dinero y espera poder contar con la ayuda del ayuntamiento que, sin embargo, no tiene buenas noticias para él. Mientras tanto el agente Russo detiene a un ladrón y hace un descubrimiento escalofriante.

Susanna Cutini, codirectora de la Academia Italiana de Gastronomía Histórica, en su sección RAI dentro del programa de Unomattina "Ojo con la compra" habla de las tradiciones de los postres de Pascua.

El papel de la mujer en la cocina ha sido siempre fundamental en las familias italianas, pero en los años cincuenta nunca hubiese podido salir adelante y convertirse en chef, porque su deber era cuidar a la familia.

Un viejo amigo de Luca llega inesperadamente al pueblo. Muy pronto los dos amigos y todo el equipo de investigación tendrán la oportunidad de examinar el lugar del delito.

Uno de los motivos principales, según algunos, por el que los chefs más famosos son casi exclusivamente hombres, radica en el hecho de que las mujeres no lo hacían por motivos remunerativos, mientras que los hombres han sido siempre más perseverantes desde ese punto de vista.

Los interrogatorios comienzan y la primera en responder preguntas es la viuda de la víctima. Mientras esto ocurre, el pueblo vive una emergencia después de que se hayan escapado todos los perros de la perrera municipal.

La determinación del equipo de Judo, que ya cuenta con un nuevo integrante, sale a flote cuando se va la luz en el gimnasio. Por otra parte, el agente Russo va a buscar a la pequeña víctima que salió a la luz en el último robo.

Un buen cocinero no sigue solamente las tendencias del momento, tratando de reproducirlas en la cocina, sino que también va en búsqueda del propio ideal de belleza, jugando con los ingredientes e inventando algo nuevo.

Mientras que la confusión de Lara aumenta, Luca habla con Toscani acerca del tipo de investigación que quiere llevar a cabo. Al final, el comisario recibe una inesperada visita.

Mientras que Lara le habla a Sardi sobre la confusión sentimental que tiene, Sergio le pide a Luca consejos sobre el arte de seducir. Además, Ginevra ha terminado con la autopsia y tiene información que compartir con el comisario.

El equipo de Judo comienza a llamar la atención de personas no deseadas. Mientras tanto, el agente Russo está dispuesto a darle una nueva vida a la chica que acaba de conocer y espera contar con la ayuda de Enzo.

Después de un breve encuentro con Massimo, Luca y Lara deciden ir a visitar a Belleggia. Sin embargo, su visita solo deja sustos y pocas respuestas.

La cocina en los años cincuenta se refleja también en el bienestar económico y en la población que va poco a poco culturizándose más, pero sobre todo en el turismo, donde se nos abren nuevos horizontes gastronómicos.

Además de acercarse a la viuda de Contini, la tía de Lara se entera de la fama que tenía la víctima en el pueblo. Mientras tanto, el interrogatorio a Belleggia no puede ser más frustrante.