En este vídeo podemos ver a Fellini mientras dirige a Giulietta y a su equipo durante la preparación de una escena.

Continuamos siguiendo el viaje de la "gastronomía del hambre" y descubriendo más secretos de la cocina campesina.

Nuestro viaje continúa entre el fondo marino de Panarea y la blanca tierra de Lípari.

En este vídeo, Anna nos habla del famoso barrio romano conocido como el Gueto Romano y, en particular, de su famosa plaza Mattei. ¡Descubramos el encanto de este lugar!

Sigamos conociendo el paisaje de Panarea y descubramos los episodios volcánicos que ocurren debajo de las aguas que explotan sus pescadores.

Fellini confiesa que Marcello Mastroianni es el actor con el que más le gusta trabajar. Descubramos la razón que se encuentra detrás de dicha preferencia.

En la segunda parte de este vídeo, Andromeda nos habla acerca de los diferentes tipos de helado que existen.

Veamos más de cerca la isla de Panarea, la más pequeña del archipiélago que, sin embargo, ofrece un encanto natural y mundano bastante atractivo para los turistas y visitantes.

¿Quién es Gualtiero Marchesi, cuál es su historia? ¿Cómo es que se ha convertido tan importante en el ámbito gastronómico?

Fellini se refiere a los Óscar que ha ganado en su carrera y nos ofrece una reflexión sobre el mito del cine de los Estados Unidos.

Linea Blu explora Pollara, uno de los lugares más sugerentes de Salina donde se cultiva una alcaparra de exportación. Además, podremos admirar algunas de las maravillosas vistas que se pueden apreciar desde lo alto de la isla.

¿Sabías que el helado se inventó en Italia? En este vídeo, Andromeda nos habla sobre los orígenes de esta deliciosa invención.

Seguimos con la evolución de la cocina italiana: la edad de la hambruna termina y por fin se empieza a comer no solo por necesidad, sino también por gusto... así nacen las primeras creaciones.

En estas exclusivas entrevistas Fellini habla de la presentación de su película "Ocho y medio" en Rusia y de las nominaciones a los Premios Óscar que la misma recibió en 1964.

Esto es lo que ha convertido a Gualtiero Marchesi en una estrella del firmamento culinario italiano pero también internacional: su habilidad para obtener novedades gastronómicas improvisando de manera inédita las cosas del pasado, interpretando las tradiciones de cada región y área geográfica del País, cada una diferente por sabor y calidad.