El comisario reúne a su personal para comunicar una importante noticia. Sin embargo, la reunión se interrumpe con una mala noticia.

A pesar del inesperado anuncio del comisario, la investigación continúa y poco a poco se van recolectando datos interesantes. Ginevra habla con Lara, y Luca tiene algo que decirle a su jefe.

Luca y Lara llevan a cabo un importante interrogatorio. Sin embargo, Lara también tiene la oportunidad de interrogar al comisario sobre algunas cosas.

Luca lleva a cabo un delicado interrogatorio del que, sin embargo, saca provecho revelando algo inesperado.

La invitación de Luca al cine es mucho más que un simple gesto de amabilidad con Lara y su tía. Además de eso, saldrá a la luz una escandalosa verdad.

La conversación que la tía Caterina tiene con el pescadero sirve como excusa para convocar a Marzio a un interrogatorio. Además de eso, Lara hace un descubrimiento importante.

Manteniendo su palabra, el comisario resuelve el caso en el plazo establecido y todo parece llegar a su fin.

Llega el momento de despedirse y las emociones van a mil por hora. Veamos cómo reaccionan nuestros personajes.

Sardi y Toscani le recuerdan a Lara que a veces las oportunidades en la vida sólo llegan una vez. Pero, ¿es ya demasiado tarde?

Lara y Toscani tienen que enfrentar su primera emergencia sin el comisario. Sin embargo, los problemas acaban de empezar.

Cuando el destino parece estar resuelto, el comisario se ve forzado a entrar en una situación en la cual un minuto más puede significar la diferencia entre la vida y la muerte.

La innata lucidez del comisario y la astucia de Brigadiere darán sus frutos cambiando, además, un destino que ya parecía escrito.

El caso se concluye con una fiesta entre amigos en la playa. Una fiesta en la que se consolidan y nacen nuevos sentimientos entre las personas.